martes, 27 de julio de 2010

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fútbol l Tercera división
La Balona da el volante a Navarro
Los albinegros cierran el fichaje del jerezano, un organizador que sueña con triunfar en la Línea donde otros fracasaron · "A cualquiera le gustaría jugar en ese club", dice el medio, un experto en el grupo X
QUINO LÓPEZ / LA LÍNEA ACTUALIZADO 26.07.2010 - 11:58
Da La Balona cerró anoche el fichaje del jerezano David Navarro, el medio centro organizador que buscaba y con el que da por cerrada su plantilla para la próxima temporada, salvo sorpresa.
David Navarro, nacido en Jerez un 25 de enero de 1980, es todo un experto en el grupo X de Tercera. Surgido de la cantera del Xerez su curriculum transcurre por el primer equipo azulino (1998-99), el Racing Portuense (1999-2000), el Guadix (2000-01), el Betis B (desde 2001 hasta 2004), el Don Benito (del que se marchó en 2005), el San Fernando (donde permaneció las dos temporada siguientes), el Atlético Sanluqueño (desde 2007 hasta 2009) y finalmente, el Puerto Real, en el que jugó la pasada campaña.
David Navarro (183 centímetros y 75 kilos) se ha enfrentado por tanto innumerables veces a la Balona y tiene la imagen de que acude a un club "muy profesional y con una enorme masa social detrás". "Estoy muy contento, porque es un equipo en el que cualquier futbolista le gustaría jugar y yo voy a poder hacerlo", continúa.
El nuevo 'cerebro' albinegro ha coincidido, como compañero o como rival, con Alberto Merino, Pablo Niño, Biri o Camacho, entre otros, por lo que cuando hoy se ponga las órdenes de Rafael Escobar está seguro de que se sentirá "como en casa".
El desde ayer futbolista de la Balona afronta el reto de jugar en un puesto que en las últimas temporadas parece maldito. El debate sobre el fichaje de un jugador que actúe de cerebro del equipo en el centro del campo es recurrente en el entorno del equipo de La Línea cada verano. El año pasado parecía haberse zanjado el asunto con la llegada de Pablo Niño, pero el roteño acabó rindiendo mejor para los intereses cuando desde el banquillo lo acercaron a los delanteros. La llegada de Juli no merece mayores comentarios, porque ni siquiera jugó.
La temporada anterior, Jorge Herrero estuvo en el punto de mira de la afición toda la campaña. Su rendimiento no fue óptimo, aunque Burgueña siempre confió en él. Ni el año del ascenso, la Balona encontró un organizador que luciera, porque Javi Cuevas, que había levantado muchas esperanzas, acabó sufriendo una grave lesión que le impidió responder a las expectativas. Dos años antes, en la campaña 2005/06, el responsable del área, Kuni, también cayó lesionado y se perdió muchas jornadas. Volvió a la siguiente Liga, pero tampoco estuvo fino. Antes, el propio Juli tampoco acabó de convencer a la grada, como le había pasado a Juanlu.
Las últimas referencias para David Navarro deben ser Agustín y Marín, los últimos que dejaron un buen recuerdo en La Línea en aquella temporada 1998-99 de grato recuerdo para todos los balonos.
David Navarro (derecha) pugna con Ismael Chico en un Balona-Puerto Real.

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