Pretenden fijar una posición común en defensa de sus intereses frente a la nueva normativa aprobada por la Federación Española.
TERCERA DIVISIÓN
Manuel Fernández, presidente del Atlético Sanluqueño, viajará mañana hasta Granada donde se citará con los mandatarios de los equipos de tercera división de los grupos IX y X, correspondientes a Andalucía.
Con esta cita, impulsada por Nicolás Mingorance, presidente del Motril, los clubes intentarán defenderse frente a una normativa impulsada por la AFE y aprobada recientemente por la Española que condenaría al descenso de categoría a todos aquellos clubes que no estén al corriente de pago, antes del 31 de julio, con sus futbolistas de las dos últimas temporadas.
El principal argumento que esgrime el presidente motrileño en contra de la Federación es el abandono por parte del máximo estamento hacia los clubes modestos, condenados a la desaparición a base de retransmisiones televisivas, nulo apoyo institucional y unos costes de inscripción, arbitrajes y demás completamente desproporcionados. Cabe reseñar, en este punto, que un simple arbitraje de tercera división cuesta la friolera de 740 €. Una cifra altísima para el fútbol aficionado y difícil de recaudar en muchísimas ocasiones.Después de una primera toma de contacto, la intención de los clubes no es sólo la defensa común ante esta decisión, sino que pretenden constituir una plataforma reivindicativa que tomará la iniciativa en todas aquellas cuestiones que afectan al fútbol modesto en general.
PepeJimenéz / Web atleticosanluqueno.com
TERCERA DIVISIÓN
Manuel Fernández, presidente del Atlético Sanluqueño, viajará mañana hasta Granada donde se citará con los mandatarios de los equipos de tercera división de los grupos IX y X, correspondientes a Andalucía.
Con esta cita, impulsada por Nicolás Mingorance, presidente del Motril, los clubes intentarán defenderse frente a una normativa impulsada por la AFE y aprobada recientemente por la Española que condenaría al descenso de categoría a todos aquellos clubes que no estén al corriente de pago, antes del 31 de julio, con sus futbolistas de las dos últimas temporadas.
El principal argumento que esgrime el presidente motrileño en contra de la Federación es el abandono por parte del máximo estamento hacia los clubes modestos, condenados a la desaparición a base de retransmisiones televisivas, nulo apoyo institucional y unos costes de inscripción, arbitrajes y demás completamente desproporcionados. Cabe reseñar, en este punto, que un simple arbitraje de tercera división cuesta la friolera de 740 €. Una cifra altísima para el fútbol aficionado y difícil de recaudar en muchísimas ocasiones.Después de una primera toma de contacto, la intención de los clubes no es sólo la defensa común ante esta decisión, sino que pretenden constituir una plataforma reivindicativa que tomará la iniciativa en todas aquellas cuestiones que afectan al fútbol modesto en general.
PepeJimenéz / Web atleticosanluqueno.com
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